El Papa también volvió a manifestar su preocupación por el conflicto entre Rusia y Ucrania. “Detengan la matanza de inocentes”, expresó.
Como cada domingo, el Papa Francisco volvió a pedir desde el Vaticano que haya un alto el fuego en la guerra que se libra en Medio Oriente, pero además exigió “respetar” a los cascos azules de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que están en la frontera entre Líbano e Israel, cinco de cuyos miembros resultaron heridos en los últimos días en los ataques que las fuerzas de Tel Avi realizan en esa zona con miembros de Hezbollah.
“Me siento cercano a todos los pueblos implicados, Palestina, Israel, Líbano, donde pido que los soldados de mantenimiento de la paz de la ONU sean respetados”, expresó el Sumo Pontífice desde el Vaticano.
El pedido tuvo lugar luego de que esta semana la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) denunciara que sus fuerzas fueron atacadas por el ejército de Israel en la ciudad libanesa de Naqura, lugar donde tienen su cuartel general, y en otras posiciones, dejando al menos cinco cascos azules heridos.
“Vuelvo a pedir un alto el fuego inmediato en todos los frentes y que se sigan las vías de la diplomacia y el diálogo para alcanzar la paz”, reiteró el referente de la Iglesia Católica al finalizar el tradicional rezo del Ángelus, momento en el que también pidió por “las víctimas, los desplazados y los rehenes”.
En el marco de un conflicto donde fracasaron los intentos de negociar un cese en los combates en Líbano y Gaza, agregó: “Hermanos y hermanas, la guerra es una ilusión. Nunca traerá la paz ni la seguridad, es una derrota para todos, especialmente porque nos creemos invencibles. Por favor, paren”.
El Papa también volvió a manifestar su preocupación por el conflicto entre Rusia y Ucrania tras tener una reunión el pasado viernes con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, donde abordaron los duros meses que se aproximan con la llegada del invierno boreal, los ataques a la red eléctrica y al avance de las tropas rusas.
“Hago un llamamiento para que no se deje morir de frío a los ucranianos”, expresó, aunque sus esfuerzos hasta el momento no han dado resultados a la hora de mediar en el conflicto, y concluyó: “Detengan los ataques aéreos contra la población civil, que es siempre la más golpeada. Detengan la matanza de inocentes”.