Viuda hace apenas un mes, Nidia Alderete Castellanos, de 82 años, fue asaltada, golpeada y mantenida cautiva por dos delincuentes, ayer entre las 3.40 y 4.40, en su casa del barrio Huaico Hondo, en la capital de Santiago del Estero. La pobre señora fue despojada de $ 1.700.000 más 25 pulseras de oro y otras joyas, estimándose un botín de $ 5 millones. El horroroso hecho tuvo de involuntaria protagonista a una mujer que vive sola en su casa.
De acuerdo con el relato de la señora Castellanos, la pesadilla comenzó a las 3.40 de ayer. Dos maleantes, con rostros descubiertos, la despertaron a los gritos. Nadie supo cómo se enteraron que antenoche una nieta no acompañaría a Nidia como lo venía haciendo habitualmente.
La lógica de la policía es que montaron vigilancia y al obtener certezas, decidieron golpear. Primero que nada, “trabajaron” casi 30 minutos para destruir el portón de hierro del frente de la vivienda. Luego, pudieron irrumpir a la casa a su antojo. Dado a las bajas temperaturas, “trabajaron” desde la vereda con la certeza de que nadie los delataría.
Una vez adentro, redujeron en escasos minutos a la mujer y la encerraron en su habitación. Sin resistencia, los visitantes literalmente dieron vuelta todo. Así, se apoderaron de 25 pulseras de oro, anillos, dos Led y otros aparatos. Insatisfechos con el botín, uno abordó a la dueña de casa amenazante.
“Hdp, dame la plata”, ordenó. Sabían que la mujer era dueña de un local comercial e intuyeron que había plata. Aterrada, la víctima extrajo los únicos ahorros -dentro de una caja- a su disposición. Eran $ 1.700.000 que dibujaron sonrisas en los dos delincuentes. Recién entonces, huyeron de la casa y se perdieron afuera en la oscuridad de Antenor Álvarez.
La investigación
Como pudo, la damnificada apodada “Pimpi”, se comunicó con sus nietos, quienes a los 15 minutos se presentaron en el inmueble. Luego, alertaron al personal de la Seccional 5ª y a sus pares de la División Criminalística.
En forma simultánea, trabajaron paramédicos quienes confirmaron hematomas en brazos, piernas y espalda, deslizaron los voceros a EL LIBERAL. Visiblemente shockeada, “Pimpi” fue conducida a un centro de salud y estabilizada.
Los expertos señalaron que su cuadro era delicado, ya que al temor se le sumaron golpes, los cuales demandarán un estudio en profundidad.
No fue un golpe al voleo, sino bien planificado
Los investigadores tienen un “censo” del bajo mundo en la zona norte de la ciudad. Es decir, los dos asaltantes, que actuaron con cuchillos, ya estarían identificados por los experimentados policías de la 5ª y sus pares de Robos y Hurtos.
Al cierre de esta edición, los “socios” eran vigilados de un modo no invasivo y lo sustancioso es que ninguno durmió en sus viviendas.
Del mismo modo, sus rostros eran vinculados a dos sujetos que recuperaron la libertad en las últimas semanas y un detalle nada menor: tendrían lazos familiares con dos hombres (pintores y soldadores) que trabajaron meses atrás en la casa de doña “Pimpi” y que tuvieron el tiempo necesario para conocer el movimiento de la casa.
Allí giraba la teoría más fuerte. La anciana no fue asaltada al voleo, sino que los artífices del golpe se valieron de personas que conocían la casa, por dentro y fuera. Dado a la gravedad del atraco, los policías indagaban anoche a contrarreloj, a sabiendas que no pueden darle una ventaja de tres días, porque se desprenderán del botín y desaparecerán de la provincia. /El Liberal