La oposición insiste en sumar el presupuesto al temario. Durante las sesiones extraordinarias, también se discutirán la eliminación de las PASO, la ley de Ficha Limpia y el nombramiento de jueces para la Corte Suprema
Con el objetivo de acordar el apoyo a proyectos claves que se van a tratar en la Cámara alta durante estas sesiones extraordinarias, el Gobierno también está organizando una reunión en Casa Rosada con los senadores de la oposición dialoguista.
Si bien todavía no hay una fecha definida, fuentes cercanas a las negociaciones aseguraron que el encuentro se realizaría “a la brevedad” y será Guillermo Francos quien se encargará de enviar las invitaciones correspondientes.
Mientras tanto, hoy por la tarde, el jefe de Gabinete recibirá en su oficina a los diputados del PRO y de la Unión Cívica Radical (UCR), a quienes les explicarán en profundidad las iniciativas enviadas al Congreso por el Poder Ejecutivo.
El gran ausente de la jornada sería el líder de Encuentro Federal, Miguel Ángel Pichetto, quien, a pesar de que fue convocado, anticipó que no va a ir porque considera que las conversaciones deberían darse en el Palacio Legislativo.
En el Senado, las autoridades nacionales tienen como principal interés la aprobación de los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla a la Corte Suprema de Justicia, que por el momento no cuentan con el respaldo necesario.
Si bien el primero de ellos ya cuenta con dictamen y pasaría la votación sin problemas, el segundo juez es más resistido y el presidente Javier Milei incluso analiza designarlo por decreto.
Para evitar eso, Francos invitará a los principales dirigentes de la oposición dialoguista en el Senado, Eduardo Alejandro Vischi, de la UCR, y Luis Juez, que -por ahora- sigue al frente del PRO.
El cordobés se mostró en el último tiempo muy cerca del oficialismo y ya expresó su intención de abandonar la presidencia del bloque que, no obstante, permanecería integrando, aunque ya como un miembro más.
Sin embargo, en el Gobierno no descartan extender la reunión a otros espacios cercanos, como Carlos “Camau” Espínola, de Unidad Federal; Lucila Crexell, de Movimiento Neuquino, y Juan Carlos Romero y Beatriz Ávila, de Cambio Federal y Por la Justicia Social, respectivamente. Juntos componen el interbloque “Provincias Unidas”.
En septiembre pasado, el propio Milei se reunió en Balcarce 50 con ellos y con el entonces senador Edgardo Kueider, que meses más tarde fue expulsado de su banca por haber sido detenido en la frontera con Paraguay con más de 200 mil dólares sin declarar.
En aquella oportunidad, el mandatario dialogó durante tres horas en la previa de la votación sobre el DNU que asignó fondos reservados a la SIDE y el presupuesto de las universidades, y en ambos casos el oficialismo terminó perdiendo al día siguiente.
El jefe de Gabinete confía en que esta vez pueda ser diferente y cree que el encuentro con los bloques aliados destrabará la aprobación de los pliegos de Lijo y García Mansilla a la Corte Suprema.
No está definido todavía si también participará la vicepresidenta Victoria Villarruel, que en las últimas semanas intensificó sus diferencias con la Casa Rosada y ni siquiera fue avisada aún del cónclave.
Las autoridades nacionales saben que en esta Cámara se terminará de definir el resto de las iniciativas que forman parte del temario de verano, entre las cuales están la reforma política, con la eliminación de las PASO incluida, y Ficha Limpia, entre otras.
El Gobierno quiere que todas estas medidas sean aprobadas antes del 21 de febrero, cuando finalizará el periodo legislativo extraordinario convocado por Milei, para comenzar en marzo el segundo año parlamentario de la gestión libertaria con nuevos proyectos a discutirse.
El Presupuesto 2025
Por la decisión administrativa 5/2025 del 11 de enero, el presidente Javier Milei prorrogó, por segundo año consecutivo, la ley de Presupuesto General de la Administración Nacional para el Ejercicio 2023. Se trata del presupuesto sancionado durante la gestión del expresidente Alberto Fernández y del exministro Sergio Massa.
Esa decisión generó críticas de diferentes sectores, incluso un documento del PRO, con un tono fuerte, poco frecuente para la relación parlamentaria entre los partidos políticos de Javier Milei y de Mauricio Macri. El PRO de Cristian Ritondo tiene la idea de escuchar los planteos de la jefatura de Gabinete y saber cuál será la postura dle oficialismo para las sesiones extraordinarias que finalizan el próximo 21 de febrero
La UCR escuchará, pero planteará la necesidad de discutir el proyecto de ley de presupuesto 2025. Es, en parte, el mandato que los diputados radicales le dieron al cordobés De Loredo. A ese pedido de la UCR podría sumarse el partido amarillo, pero ninguno de los dos sectores condicionará el tratamiento del temario de las extraordinarias a la inclusión del presupuesto en el debate parlamentario.
El Gobierno tomará nota de que el Congreso quiere discutir un presupuesto de gastos y recursos del Estado. El ministro coordinador repetirá que es indispensable un presupuesto equilibrado que sostenga el déficit cero.