En las últimaa horas, el expresidente Alberto Fernández quiso tomar distancia del escándalo del negocio millonario con los seguros que contrataba la ANSESdurante su gestión, por el cual fue denunciado, y aseguró: “Yo no pedí por nadie”.
“Dudo que mi secretaria haga una cosa así; si lo hizo, no lo avalo; ninguno te va a decir que pedí por alguien; yo lo dudo, pero no puedo garantizar que ella no haya hecho una cosa así; si fue así, se extralimitó”, afirmó al respecto el ex mandatario, en declaraciones a La Nación.
Cabe recordar que una auditoría realizada por el gobierno de Javier Milei detectó irregularidades en el organismo público vinculadas a las intermediaciones en los seguros, por lo que la mirada recayó sobre Fernández, no solo por tratarse de una decisión que se tomó durante su mandato, sino también por ser un área que conoce en profundidad y por los vínculos que mantiene con dos personas que fueron claves en ese esquema.
Así, se ordenaba a los organismos del Estado a tramitar sus pólizas a través de Nación Seguros, pero al mismo tiempo permitía la intervención de brokers privados, que cobraban comisiones por sobre los valores de mercado. Entre 2019 y 2023, esta área estuvo en manos de Alberto Pagliano, un amigo cercano de Alberto Fernández.
Por otro lado, en la investigación se identificó como uno de los brokers que se vieron beneficiados a Héctor Martínez Sosa, quien está casado con una secretaria del expresidente, a quien él mencionó en su entrevista.
Fernández descartó haber hablado con Martínez Sosa sobre su rol como intermediario del Estado, así como también negó que haya existido un encuentro entre él, el esposo de su secretaría y Pagliano. De igual forma, defendió a uno de los que se vieron beneficiados con este negocio millonario al sostener: “(Martínez Sosa) No se trata de un Lázaro Báez”.