La vicepresidenta Victoria Villarruel rompió el silencio luego de la polémica en torno al debate en el Senado del DNU, que fue rechazado, luego de que ella habilitara el debate que el kirchnerismo le pidió en reiteradas oportunidades.
Una vez rechazada la norma en la Cámara alta, y que horas antes, Javier Milei la acusara de tener una agenda propia, la titular del recinto se expresó y ratificó su apoyo al Presidente.
“Mi compromiso con Argentina y con Javier Milei es inclaudicable. Desde el momento en que Javier Milei me pidió que lo acompañara como diputada y luego en la fórmula presidencial nosotros sabíamos a lo que nos enfrentábamos y hemos trabajado espalda con espalda, a pesar de los incansables intentos por dividirnos. El Senado es la Casa de las Provincias y es un poder independiente de la República Argentina. Yo no me voy a convertir en Cristina Fernández de Kirchner. No me voy a convertir en aquello que vinimos a cambiar”, manifestó Villarruel.
Y cerró: ”No hay gobierno sin institucionalidad. Por eso la política tiene que trabajar para la gente. No hay progreso sin libertad. Todo por Argentina”.