El pasado miércoles por la mañana, Tucumán y barrio Sur de la Capital conocían la noticia de que un joven había sido hallado muerto en el subsuelo de un edificio de calle Moreno al 300.
Tras el trabajo de los investigadores, se conoció que la víctima era Matías Ezequiel Solares Rotnitzky, tenía 35 años y que era oriundo de San Pedro de Jujuy. El sitio Todo Jujuy, describió al joven y afirmó que “su compromiso con la salud lo llevó a estudiar Medicina, dedicándose a ayudar a los demás con vocación y profesionalismo”. “Durante su juventud, residió en la localidad de La Mendieta, donde dejó una huella profunda en quienes lo conocieron”, aseguraron.
Fue tan así la Municipalidad de La Mendieta, localidad del departamento de San Pedro, utilizó las redes sociales para despedirse del Solares Rotnitzky: “Con profundo dolor comunicamos el fallecimiento de Matías Solares Rotnitzky, joven que residió en nuestra localidad. Acompañamos a sus familiares y amigos en este doloroso momento y rogamos elevar una oración por su eterno descanso”.
El posteo rápidamente, se llenó de mensajes de dolor y despida de amigos y familiares que lamentaron la triste noticia de su fallecimiento.
La muerte de Matías Ezequiel Solares Rotnitzky
Según fuentes judiciales, el fallecido fue identificado como Matías Ezequiel Solares Rotnitzky, de 35 años, y que llegó el domingo 26 de enero a las 8 al edificio con una valija. Luego, según observaron los investigadores a través las cámaras de seguridad, se dirigió a su departamento donde dejó el equipaje.
Minutos después, se observa a Solares Rotnitzky dirigiéndose a tomar el ascensor. Lo que creen los investigadores, es que el hombre se confió que el ascensor aún estaba en el lugar, intentó subir y cayó al vacío.
Agentes judiciales confirmaron además que analizaron el departamento y no sólo encontraron que la valija estaba a la par de la puerta, sino que además todo estaba perfectamente ordenado. También estaban todos los objetos de valor en el interior de la vivienda y al requisar el cuerpo, descubrieron que tenía en su poder la billetera con dinero y su celular. Esos son indicios suficientes para sospechar de que no fue víctima de un homicidio en ocasión de robo.
En un primer análisis, los forenses señalaron que sólo presentaba las lesiones típicas de una caída. Sin embargo, recomendaron que sea sometido a una autopsia para determinar si no presenta alguna herida que permita establecer si fue víctima de un crimen y, el o los autores, para despistar, arrojaron el cuerpo al hueco del ascensor para hacer creer que su muerte fue accidental. /eltucumano
