Las bebidas azucaradas son líquidos edulcorados con azúcares añadidos de distintas formas, como azúcar moreno, edulcorante de maíz, jarabe de maíz, fructosa, miel, azúcar sin refinar o sacarosa. Entre ellas se encuentran las gaseosas o refrescos, las bebidas energéticas, las aguas endulzadas, entre otros, señalan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
De acuerdo con los CDC, el consumo frecuente de bebidas azucaradas está relacionado con obesidad, diabetes tipo 2, cardiopatías, enfermedades renales, enfermedad hepática no alcohólica, caries dental, y gota (un tipo de artritis).
A su vez, señala el organismo estadounidense, el consumo de todo tipo de bebidas azucaradas está asociado con comportamientos no saludables como fumar, no dormir lo suficiente, no practicar ejercicio o comer comida rápida con frecuencia.
Cuáles son los graves efectos del consumo de gaseosas
Puntualmente, el consumo excesivo de gaseosas se ha relacionado con un mayor riesgo de mortalidad por todas las causas. Así lo indica un estudio publicado en 2019 coordinado por especialistas de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés) en el cual se examinó la asociación entre el consumo total de refrescos endulzados con azúcar y artificialmente y la subsiguiente mortalidad total y por causas específicas.
La investigación incluyó datos de más de 450 000 personas de 10 países europeos y concluyó que, en comparación con los participantes que bebían menos de un vaso de refresco al mes, los participantes que bebían dos o más vasos de estas bebidas al día tenían un mayor riesgo de mortalidad por todas las causas, publica National Geographic.
A su vez, los investigadores advirtieron que el consumo de dos o más vasos de refrescos endulzados artificialmente por día se asocia a muertes por enfermedades circulatorias. Mientras que el consumo de uno o más vasos de refrescos endulzados con azúcar diarios se vincula con muertes por enfermedades digestivas.
Frente a esto, los CDC recomiendan limitar el consumo de bebidas azucaradas ya que hacerlo no solo previene enfermedades, también contribuye a llevar una alimentación saludable.
Según la Inteligencia Artificial ChatGPT, el consumo excesivo de bebidas cola y otras bebidas azucaradas ha sido asociado con diversos problemas de salud, según varios estudios y organizaciones de salud, incluyendo el gobierno de Estados Unidos. A continuación, se mencionan algunos de los posibles efectos negativos para la salud asociados con el consumo excesivo de bebidas cola:
– Obesidad: Las bebidas cola suelen contener altos niveles de azúcares añadidos, lo que puede contribuir al aumento de peso y la obesidad. La obesidad, a su vez, está vinculada a una serie de problemas de salud, como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y problemas articulares.
– Diabetes tipo 2: El consumo regular de bebidas cola con alto contenido de azúcares se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. El exceso de azúcar puede afectar la sensibilidad a la insulina y contribuir al desarrollo de resistencia a la insulina.
– Enfermedades cardíacas: El consumo excesivo de azúcares añadidos, especialmente en forma de bebidas azucaradas, ha sido vinculado con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas, incluyendo enfermedades coronarias.
– Problemas dentales: Las bebidas cola son ácidas y contienen azúcares, lo que puede contribuir a la erosión dental y a la formación de caries.
– Problemas gastrointestinales: El consumo regular de bebidas cola, que a menudo contienen cafeína y otros compuestos, puede causar problemas gastrointestinales, como acidez estomacal y problemas de digestión.
– Problemas óseos: Algunos estudios sugieren que el consumo excesivo de cola puede estar asociado con una disminución en la densidad mineral ósea, lo que podría aumentar el riesgo de fracturas.
Es importante destacar que estos efectos negativos para la salud están relacionados principalmente con el consumo excesivo y regular de bebidas cola.
Las pautas dietéticas y de salud suelen recomendar limitar el consumo de azúcares añadidos, incluyendo aquellos presentes en las bebidas azucaradas, para mantener una dieta equilibrada y promover la salud a largo plazo.