Con el nuevo incremento en las jubilaciones, el haber mínimo pasará de $206.931 a aproximadamente $215.600
Las jubilaciones y pensiones del sistema general de la Anses subirán un 4,2% en julio. Se trata del reajuste a aplicar según lo dispuesto por el decreto de necesidad y urgencia (DNU) 274 y el porcentaje es equivalente a la variación que, según comunicó esta tarde el Indec, tuvo en mayo el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Con el nuevo incremento, el haber mínimo pasará de $206.931 a aproximadamente $215.600 ($285.600 con bono) y el máximo subirá de $1.392.450 a una cifra cercana a $1.450.900, ambos montos, en bruto. El reajuste alcanzará a todos los ingresos del régimen general, sin importar de cuánto sea el monto. También abarcará a las prestaciones no contributivas, como la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), que equivale al 80% del haber mínimo. No tendrá alcance, en cambio, para quienes cobran prestaciones de sistemas especiales, como el caso de los docentes (en este caso, continúa una modalidad de reajustes trimestrales).
Las cifras exactas dependerán de cuántos decimales tenga el índice que finalmente se utilice. Con respecto al bono de $70.000, desde el Ministerio de Economía confirmaron a La Nación que seguirá pagándose tal como se viene abonando en los últimos meses. Será, por tanto, de $70.000 para quienes perciben como ingreso previsional solo un haber mínimo, y de importes inferiores para quienes cobren en julio haberes de hasta, aproximadamente, $285.600.
La cifra de $70.000 está congelada desde marzo. Al mantenerse sin cambios para julio, quienes tienen como ingreso solo un haber mínimo recibirían un importe en bruto de alrededor de $285.600, y el aumento respecto de lo cobrado en el actual mes de junio (solo por el ingreso mensual, sin contar el aguinaldo) será de 3,1%.
En los siete primeros meses del año los haberes previsionales propiamente dichos (sin bono ni adicionales) habrán recibido un aumento acumulado de 104%. En marzo hubo una suba de 27,18%, porque ese fue el resultado de la fórmula de la ley 27.609, que rigió desde 2021. En abril comenzó la vigencia de los cambios hechos por decreto: el aumento de haberes fue de 27,4% ese mes y de 11,01% en mayo, en tanto que es de 8,83% en el actual junio. Desde el cuarto mes del año se aplican alzas mensuales y por inflación y en abril se agregó, además, un 12,5% en concepto de “incremento extraordinario”.
Entre enero y mayo, un período en el cual la variación de precios acumulada fue, según el Indec, de 71,9%, los ingresos de quienes no cobran bonos (que fueron quienes más poder adquisitivo perdieron en los últimos años y que solo en 2023 vieron reducido su ingreso real en más de un tercio) subieron un 79,9%, en tanto que los de quienes perciben la prestación básica (haber mínimo más refuerzo) aumentaron un 62%.
Vieja fórmula, ya sin vigencia
Mientras que el período de abril a junio fue, según la normativa, de transición entre la vieja fórmula de movilidad y el mecanismo de reajuste mensual por IPC, en julio ya queda definitivamente sin vigencia el cálculo aprobado durante el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, por el cual en 2023 se otorgó un aumento acumulado de 110,9% muy por debajo de la inflación de 211,4%.
Respecto de esa etapa de transición, desde el séptimo mes del año hay al menos dos grandes cambios. Por un lado, no se comparará ya el resultado de la fórmula de la ley con el incremento acumulado en un trimestre determinado (eso se hizo en referencia al período de abril a junio, porque el DNU había establecido que si el resultado del cálculo de la ley 27.609 daba un índice mayor a las subas otorgadas -cosa que no ocurrió- el Estado debía abonar lo necesario para cubrir la diferencia.
El otro cambio significativo es que a partir de julio se actualizarán por inflación también los montos de las asignaciones por hijo, tanto de la AUH, cobrada por trabajadores informales y desocupados, como de las prestaciones percibidas por un grupo de asalariados registrados y monotributistas. El próximo mes, por tanto, los importes se incrementarán un 4,2%. La AUH, por ejemplo, será de $77.477, aunque mensualmente se cobra el 80% del monto total (en este caso, $61.982) y el resto se percibe anualmente, contra la presentación de las constancias del cumplimiento de las condicionalidades en materia de educación y cuidado de la salud.
En el mes actual la jubilación mínima es de $206.931,10, monto al que se suma el bono de $70.000 para totalizar una cifra de $276.931. Se agrega, por ser junio, el medio aguinaldo, con lo cual el importe total es, en bruto, es de $380.396.
Y solo para quienes están amparados por la garantía legal de que su ingreso no sea inferior al 82% del salario mínimo (son quienes no tuvieron moratoria que, en el caso de los jubilados que cobran el haber mínimo son solo alrededor de 5%) se adiciona también un plus por abril y otro por mayo, de hasta $9979,3 y de hasta 1996,8, respectivamente. El haber máximo del sistema es, en bruto, de $1.392.450.
FUENTE: La Nacion