La Municipalidad de San Miguel de Tucumán realizó inspecciones del servicio ante la restricción anunciada por los empresarios
La Municipalidad de San Miguel de Tucumán realizó este viernes inspecciones en el servicio de transporte público luego de que la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) anunció restricciones en el servicio: se detectaron demoras de hasta 40 minutos y las empresas de transporte se exponen a multas de hasta 100.000 boletos mínimos, que hoy está a $230.
Los controles se realizaron principalmente en tres puntos fijos, paradas neurálgicas del sistema de transporte público en la Capital tucumana: la intersección de calle Francia y avenida Avellaneda (Línea 18 y 19); la esquina de Córdoba y Salta (Lineas 11,9,1,17,5,8); y en calle Crisóstomo Álvarez al 400 (Líneas 12,3,7,4,10,6).
Desde la Intendencia se informó que durante las inspecciones a cargo de 15 agentes del área operativa de Transporte, se constató que hubo de momento demoras de hasta 40 minutos en las frecuencias (entre el paso de un colectivo y la unidad siguiente), por lo que se intimará a las empresas y habrá sanciones.
El secretario de Movilidad Urbana municipal, Benjamín Nieva, advirtió que “se trabaja para constatar las infracciones y documentarlas, a los fines de aplicar todo el peso de la ordenanza número 400/79, que establece un sistema de sanciones a las empresas que hayan incurrido en faltas”.
En este sentido, informó que dicha norma contempla multas que van desde un monto equivalente a los 2.000 boletos hasta los 100.000 boletos mínimos (el precio de cada viaje es actualmente de $ 230).
“No queremos llegar a esta situación y llamamos a la reflexión del empresariado. Sabemos que estamos en una situación de crisis, pero también atendiendo que las crisis se resuelven a través del diálogo y no con este tipo de medidas intempestivas”, remarcó.
Nieva planteó que “la Municipalidad quiere garantizar que no se resienta la prestación del servicio, porque se perjudica a los usuarios, que no pueden viajar en tiempo y forma a los distintos lugares a los que desean trasladarse”.
En ese marco, subrayó: “Todos los días que tengamos lamentablemente esta medida decidida por la AETAT, nosotros vamos a estar haciendo las inspecciones, documentando las infracciones y aplicando la ordenanza 400”.
Las demoras en el servicio
El coordinador técnico de la Dirección de Transporte, Jorge Rodríguez Robledo, detalló que durante los operativos “se controla que la frecuencia no supere los ocho minutos, que es lo óptimo, y se ha detectado que hay demoras de hasta 40 minutos entre el paso de una unidad y la siguiente, lo que genera malestar entre los usuarios del transporte público”.
Por esta razón, explicó que se está trabajando “para documentar esta situación a los fines de poder corregirla, conforme a lo dispuesto la ordenanza número 400/79, que en su artículo 51 establece sanciones para las empresas del servicio de transporte público de pasajeros que incurran en infracciones”.
Rodríguez Robledo informó que “los controles se realizan en Córdoba y Salta, en Crisóstomo Álvarez al 400 y en avenida Avellaneda y Francia, que son los tres puntos estratégicos elegidos debido a que son paso obligatorio para las 14 líneas de ómnibus que recorren la Capital”.
El funcionario recalcó que “debido a que se constataron demoras de 40 minutos en las frecuencias, se van a realizar las observaciones y se harán las correspondientes intimaciones a las empresas que prestan este servicio esencial a la comunidad”.