En el marco de una multitudinaria muestra de fe y devoción por el santo del pan y el trabajo, San Cayetano, el arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez, presidió la procesión desarrollada durante la tarde de este miércoles.
Pese a las bajas temperaturas, miles de fieles se acercaron para pedir o para agradecer.
Durante la mañana se realizaron tres misas en el templo de la avenida Brígido Terán al 900, donde el movimiento fue intenso durante toda la jornada.