Este viernes se realizó el cierre de los talleres que se brindaron durante el receso.
Durante el receso por las vacaciones de invierno, más de 100 niños que están dentro de la Condición del Espectro Autista (CEA) participaron junto a sus familias los talleres gratuitos que ofreció la Casa Azul, ubicada en calle Alberdi 250. Allí, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán brinda atención integral y servicios médicos, terapéuticos, educativos y legales a personas con autismo como así también a sus familias y cuidadores.
Este viernes, los chicos y sus familias compartieron la jornada de cierre de los talleres de julio junto a los profesionales de la Casa Azul, con la participación de la subsecretaria de Desarrollo Humano municipal, Alejandra Trejo, y la directora de la Casa Azul, Laura Trejo.
Acompañaron el centro de discapacidad Marckay, el centro de día Mosaicos y el observatorio Willka Wara, que llevó una propuesta única de estimulación sensorial visual con telescopios para ver los detalles de la luna, su brillo, cráteres y diferentes texturas.
“Brindar estos espacios son muy importantes para nosotros como Municipio, ya que la intendenta Rossana Chahla tiene una mirada de una ciudad de oportunidades, una ciudad abierta, inclusiva para todos”, afirmó Alejandra Trejo, quien indicó que “durante los talleres de vacaciones de invierno, se brindaron herramientas a los papás sobre cómo hacer el acompañamiento de nuestras personas o niños con condición del espectro autista”.
La funcionaria señaló que la Casa Azul brinda un servicio de calidad a cargo de un equipo interdisciplinario y que “las intervenciones que se realizan no solamente son al paciente o al niño, sino también a todo el grupo familiar, porque el acompañamiento familiar es fundamental”.
En tanto, la directora de Casa Azul contó que la temática elegida para el cierre vacacional fue la de un circo inclusivo, donde pudieron estimular las habilidades sociales de los chicos con CEA. “Trabajamos mucho para que puedan participar en eventos y no tener esa dificultad sensorial, adecuando los momentos donde ellos pueden crear esas habilidades sociales con sus compañeritos y crear también amigos nuevos”, expresó.
Trejo informó que actualmente Casa Azul atiende a más de 200 chicos, entre los que asisten a talleres, terapia y los que están en proceso de diagnóstico. Además, unas 180 personas concurren a la escuela de padres de la institución.