El jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos, anticipó que estarán obligados a implementar esquemas de cortes programados del servicio de luz.
Se acerca el verano y la generación de energía va a ser sobrepasada por la demanda ante las altas temperaturas. El jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos, anticipó que estarán obligados a implementar esquemas de cortes programados del servicio de luz debido a la escasez del suministro energético por la falta de inversiones en el sector en los últimos años.
¿Qué sucederá en Tucumán con los apagones? La solución según el interventor del Ente Único de Control y Regulación de los Servicios Públicos de Tucumán (Ersept), José Ricardo Ascárate, sería que la Casa Rosada restituya 100 megavatios (MW) que se retiraron de la Central Independencia.
“En Tucumán no tendríamos problemas si el Gobierno nacional asegura que se repongan los 100 MW que retiró la Central Independencia (operada por el Grupo Albanesi) de la generación en Tucumán. Si esto no ocurre, vamos a crear planes de contingencia que se van a basar fundamentalmente en colocar equipos generadores. Algo ya hemos hecho el año pasado”, dijo el ex secretario de Energía en diálogo con La Gaceta.
Semanas atrás, Ascárate había enviado al gobernador, Osvaldo Jaldo, y a los ministros Marcelo Nazur (Obras y Servicios Públicos) y Daniel Abad (Economía y Producción) un informe de previsión y proyección para el verano 2024/2025. Allí ya había plasmado, entre otras cuestiones, la necesidad de solicitar a la Nación, vía Cammesa o la Secretaría de Energía, que se contemple un plan de contingencia nacional para obtener los recursos que permitan inyectar los 100 MW que quedaron fuera de disponibilidad. En las conclusiones se advirtió también que la capacidad de transporte durante días de picos de demanda (ola de calor) “se encuentra al límite”. En ese sentido, señaló que la obra de ampliación de capacidad que se está desarrollando de El Bracho a Cevil Pozo “es esencial para superar el verano 2024/2025 en todos los escenarios”.
Ascárate, por último, señaló que el país debe afrontar las consecuencias de años de subsidios energéticos mal manejados. Además, cuestionó el cambio de hábitos que lleva a una persona a no poder tolerar más de 30° C sin aire acondicionado. “Hay que cambiar los hábitos de eficiencia energética porque el dolor más grande lo van a tener en la factura”, mencionó.