Aunque los gremios que núclean a empleados de colectivos adherirán a la medida, mantendrán el servicio pero reducido
El paro general de la CGT del próximo miércoles 24 de enero incluirá a los trabajadores del transporte público, que resentirá el servicio de ómnibus en Tucumán con algunas particularidades.
La conducción nacional de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) resolvió adherir a la movilización en contra del DNU y la ley ómnibus que impulsa el gobierno de Javier Milei.
En esta provincia, si bien el gremio de los choferes se plegará al reclamo, los coches funcionarán de manera normal durante la mayor parte de la jornada. Sin embargo, los usuarios del turno vespertino y nocturno deberán estar atentos. “Se ha resuelto trabajar hasta las 19 o 20 de ese día”, anticipó el secretario general de UTA-Tucumán, César González.
De esta manera, explicó el líder sindical, se garantizará que los manifestantes cuenten con el servicio de transporte público tanto para acercarse a la concentración -prevista para el mediodía, en la plaza Independencia- como para volver a casa una vez que finalice el acto.
Los colectivos volverán a estar disponibles con el primer turno del jueves 25 (las primeras unidades parten de los galpones poco antes de las 5).
“Estamos preocupados por la reforma de la Ley de Contrato de Trabajo y de otras normativas que resguardan los derechos de los trabajadores”, advirtió González.
El referente de UTA agregó que, ante los indicios que arroja el escenario nacional, “será el comienzo de una ardua lucha por parte de los trabajadores para evitar estas reformas”. “Estamos de acuerdo en que se haga una reforma laboral, pero debe ser de manera consensuada, con la participación de los trabajadores, y en el ámbito de las comisiones correspondientes. Tiene que ser una discusión democrática; no este intento grosero de imponer cambios que implican pasar del respeto por ciertos beneficios y derechos, a directamente un sistema de esclavitud”, analizó González.