Los ediles dieron a conocer informes realizados en dos puntos de la provincia, ejecutados por el Siprosa, y que están por fuera de los lÃmites bacteriológicos y fisico-quÃmicos
Esta mañana los concejales radicales José MarÃa Canelada y Gustavo Cobos presentaron públicamente dos análisis de la potabilidad del agua de Tucumán que se tomaron en 2023 y en 2024, en distintos puntos de la ciudad capital, y que concluyen que el lÃquido no cumple con los parámetros que establece el Código Alimentario Argentino para el agua potable. Ambos análisis fueron canalizados por el Sistema Provincial de Salud, tanto en sus muestras como en su estudio, y llevan las firmas de la entonces Directora General de Salud Ambiental, Julieta Migliavacca, y del actual funcionario que ocupa ese puesto, Leandro Medina Barrionuevo.
Sobre el primer informe, que data de junio de 2023, Canelada afirmó que se tomó en barrio Zenón Santillán. “Lo que nosotros encontramos en este análisis es un resultado de coliformes totales de 23, cuando el lÃmite que establece el Código Alimentario Argentino es de 1,1. Cuando hablamos de coliformes estamos hablando de materia fecal, ya sea de manera directa o a través de lÃquidos cloacales. Esto podria generar un serio riesgo de problemas gastrointestinales. Y aquà hay algo no menor: en ambos estudios las muestras fueron extraÃdas y analizadas por personal de saneamiento básico. El Estado es el garante de que el procedimiento es el correcto y es el que nos dice que este agua está por fuera de los lÃmites planteados por el Código, de manera desmesurada”, afirmó.
Por otra parte, comentó que la segunda muestra, que se tomó en enero de este año en el barrio San Miguel, no cumple con los parámetros fisico-quÃmicos necesario. “El valor respecto al color es 50 cuando el lÃmite establecido es de cinco. Respecto de la turbidez, arroja que es de 12,90 cuando el lÃmite que dice es de tres. Esto enciende una señal de alerta. No se puede mirar al costado, no se puede hacer de cuenta que acá no ha pasado nada”.
En ese sentido, además de dar a conocer los análisis, Cobos explicó que enviaron una nota al gobernador Osvaldo Jaldo para ponerlo en conocimiento y solicitar medidas urgentes para revertir esta situación. “Lo que está pasando con la situación de la provisión del agua potable en nuestras casas ya es una crisis y el gobierno tiene que hacerse cargo de esto, porque no podemos seguir asÃ, no podemos seguir con las sospechas, porque las sospechas que surgen de estos análisis viene a corroborar lo que nos dicen en cada barrio, cada uno de los vecinos que hace mucho tiempo han dejado de tomar el agua de las canillas y están gastando en bidones. El gobierno no puede seguir mirando al costado ni hacer puestas en escena”.
Por eso, además, en la nota a Jaldo se le solicitó que se realice un muestreo representativo para realizar análisis. “Estuvimos hace un par de dÃas en Villa 9 de Julio y una vecina nos suplicaba diciendo, ‘¿cómo hago para saber si el agua que está saliendo de la canilla en mi casa, la que está tomando mi mamá que está enferma, no la está enfermando más?’ y nos pedÃa ayuda para ver cómo hacÃa para que en su cuadra vayan a tomar muestras. Necesitamos darle tranquilidad a los tucumanos y quien la puede dar es el gobierno de la provincia. Entonces, lo que le estamos diciendo es que ejecuten polÃticas para salir de esta situación, que se hagan cargo en lo inmediato. Que den tranquilidad, que hagan el relevamiento, que digan exactamente cuál es la situación de cada barrio y que convoquen a los especialistas. Tenemos universidades y muchÃsimos especialistas con los que venimos hablando. Esto está pasando hace mucho, la primera nota es de hace ocho meses. Es urgente“.