El Tribunal Penal de Aviñón dicta este jueves contra los 51 acusados del caso Mazan, que juzga las constantes violaciones sufridas por Gisèle Pelicot. Hay seis acusados que quedarán libre.
Hace unos meses el mundo conoció la historia de Gisèle Pelicot. La mujer que era drograda por su marido, Dominique Pelicot, para luego invitar a decenas de hombres a su domicilio, que mantenían relaciones sexuales. Hoy jueves la justicia francesa declaró culpable de violación con agravantes a su exmujer, así como por la violación de la mujer de Jean-Pierre M., su aprendiz y uno delos 51 acusados.
La fiscalía había demandado penas de entre 4 y 18 años de cárcel para el resto de los acusados, castigos que sumaban hasta 650 años de prisión por el total de los delitos. Sin embargo, el tribunal ha comenzado a dictar penas por debajo de las solicitadas por los fiscales e incluso por debajo de la media para este delito en Francia (11 años). “Vergüenza a la justicia, justicia cómplice”, han gritado los manifestantes a las afueras de los juzgados al conocer la sentencia.
Seis de los acusados saldrán libres este jueves, pues han cumplido la condena en prisión provisional. Entre ellos, Joseph C., el único al que se imputaba un cargo de agresión sexual con agravantes y no de violación, al no haber penetración. Los magistrados han solicitado una pena de 3 años de prisión, dos de ellos suspendidos. Dado que ha pasado 4 años en prisión provisional, saldrá libre. Lo mismo ha ocurrido con Hugues M., para quien el fiscal pedía 10 años, finalmente condenado a 5 años, dos de ellos suspendidos.
La condena emitida por el tribunal de Aviñón marcará el final de un caso ya considerado histórico en Francia. Desde el comienzo del proceso judicial, Gisèle Pelicot ha mantenido un perfil público y rechazó celebrar las vistas a puerta errada con el objetivo de “que la vergüenza cambie de bando”.