Este fin de semana, todos los cines en Tucumán, proyectarán la nueva película del gran artista japonés. Todo lo que tenés que saber antes de verla
Ver una película de Studio Ghibli es una experiencia única en la vida. Cada una de ellas, te transporta a un mundo mágico de fantasía, reflexión y mucha emoción. El niño y la garza, cumple con todos los requisitos para ser una gran película. Si buscas sorprenderte, este fin de semana andá al cine.
El niño y la garza, se centra en la historia de Mahito, un joven de 12 años, que lucha por asentarse en una finca alejada de la ciudad tras la muerte de su madre en un incendio. Su padre está rehaciendo su vida con la hermana menor de su difunta esposa que espera un hijo, cuando una garza parlante le cuenta a Mahito de que su madre sigue viva, este entra en una torre abandonada que lo lleva a otro mundo.
Hasta aquí llegaremos con el resumen.
Una historia personal
Lo que podría destacar a El Niño y la Garza, dentro de todas las grandes obras del maestro Miyasaki, es que se trata de una historia personal del artesano. Luego de haber anunciado su retiro en el 2013, decidió regresar para realizar una película “que pueda mostrarle a su nieto”, con el arreglo que sería totalmente personal. Una suerte de testamento en vida de su propia existencia.
La historia está basada en Kimi-tachi wa Dō Ikiru ka (¿Cómo vives?), novela de Yoshino Genzaburō publicada en 1937, uno de los favoritos del creador. Allí un adolescente llamado Honda Jun’ichi (y de apodo Kopero), de 15 años, busca abrirse paso en el mundo y ganarse un lugar en pleno proceso de maduración.
Además, la infancia del director quedaría retratada dentro del contexto en el que se sitúa la película (Guerra del Pacífico, 1943). Hayao Miyazaki es nacido en 1941, en pleno desarrollo de la Segunda Guerra Mundial. Tuvo sus primeros recuerdos marcados a fuego por el conflicto bélico. Las explosiones y los fogonazos fueron sus primeras compañías y lo marcaron para siempre, algo que se evidencia en la situación de Mahito en la nueva película.
Según Toshio Suzuki, el ejecutivo de Ghibli y productor, Miyazaki armó la estructura de “El niño y la garza” donde él es Mahito, Suzuki, la garza e Isao Takahata, el director y cofundador del estudio, el tío abuelo del protagonista. Miyazaki tomó esa decisión, porque siempre creyó que Takahata descubrió su talento y lo ayudó a crecer, mientras que Suzuki es la garza porque ambos tienen una relación “en la que no se dan por vencidos, ni se tiran ni se empujan”.
El niño y la garza comenzó su producción en 2016 y fue estrenada siete años después. En medio de ese largo proceso, Miyazaki tuvo que enfrentar un triste momento que marcaría, de ahí en más, el rumbo del proyecto: el 5 de abril de 2018 fallecía Takahata, cofundador de Ghibli y amigo de toda la vida. Esto atrasó aún más el proyecto y alteró levemente la historia, Hayao le quitó foco al personaje del tío abuelo y centró toda la atención en la relación entre Mahito y la garza.
Toshio Suzuki recuerda que en los storyboards, mientras se diagramaba el proyecto, nunca aparecía la figura del tío abuelo hasta que entendió cuánto le dolía a Miyazaki el traerlo a la vida a través del lápiz. Este proceso le llevó casi un año luego del fallecimiento de su mentor para poder comenzar a dibujarlo.
Es una obra donde el maestro quiere expresar sus más profundos sentimientos relacionados con la pérdida y el renacimiento.
Íntima, fascinante y hermosa.
¿Vas a ir a verla?